Daizuke es un joven suertudo que siempre era acosado por chicas que como leonas en celo cuidaban el macho de su manada. Generalmente bellas chicas iban con él a todo lugar, brindándole atenciones y algunas cosas extras. A pesar de su éxito con las féminas, nuestro protagonista, le toco vivir una experiencia que difícilmente podrá borrar de sus recuerdos.
Cierto día al entrar a un café se topa con una nena que al parecer era de lo más común, este estaba lejos de imaginar que ante sus ojos estaba una de las mejores experiencias sexuales de su vida. Porque ella le daría a probar las exquisiteces del sexo que no había experimentado con otra mujer, y si alguna vez tuvo una vivencia como esa, jamás con la misma intensidad.
Esta hermosa chica sería para siempre guardada en sus recuerdos como la nena que da la mejor mamada sin censura en toda la historia. Está preciosa y sexy mujer, le daría una deliciosa caricia bucal a Daizuke, que lo llevaría hasta lo más alto del cielo. Su corta edad no hablaba poco de su enorme experiencia para brindar una de las mejores sesiones de sexo oral de todos los tiempos.
Este hermoso fellatio, no solo venía acompañado de la humedad de sus labios, también fue acompañado de una buena masturbada cubana con sus enormes senos, para terminar en una rica penetración que terminaría de unir a los apasionados amantes en una historia que sería difícil volver a olvidar.
La química surtió efecto y evidentemente ningún hombre puede con los encantos de una mujer y una vez que somos prendados por las caricias, dulzura y experiencia en la cama de una de ellas jamás volveremos a alejarnos de allí, porque nos gusta probar siempre lo mejor del sexo, y cuando hay comida en casa ningún hombre busca en la calle lo que está bajo su techo, esto le toco vivirlo a Daizuke.
